La OMS advierte: los deberes escolares perjudican la salud de los estudiantes

0
Los deberes escolares son perjudiciales para la salud, según la OMS.
Los deberes escolares son perjudiciales para la salud, según la OMS. / N BRADSHAW

Muchas son las voces que desde hace tiempo imploran una regulación de las actividades extraescolares que los estudiantes españoles realizan de forma diaria. Pedagogos, profesores y asociaciones de padres están divididos ante un problema educativo de difícil de solución. Para complicar la situación un poco más, la Organización Mundial de la Salud (OMS), en su informe de Abril de 2016, hace pública la encuesta sobre de educación que concluye que España es uno de los países con más presión de deberes escolares, y que «el estrés relacionado con el colegio tiende a ser padecido por jóvenes con elevados niveles de presión escolar y caracterizado por un incremento de comportamientos que ponen en riesgo la salud”.

La encuesta, realizada entre 2014 y 2015 por el Health Behaviour in School-aged Children, auspiciado por la OMS, a través de entrevistas con más de doscientos mil jóvenes de entre 11 y 15 años de Europa y Canadá, más de 11000 de ellos estudiantes españoles, cuyo objetivo principal es identificar los factores precipitantes de estrés a los que están sometidos los jóvenes y sus estrategias de afrontamiento. El informe es demoledor en sus afirmaciones, destacando el ascenso progresivo en el ranking de España a medida que la edad de los estudiantes aumenta. Identifica, que a los 11 años, un 34% de los niños y un 25% de las niñas afirman sentirse presionados por los deberes. A los 13, la situación se agrava de forma exponencial, siendo las chicas (un 55%) las más presionadas, por delante de los chicos (un 53%) cuando se les pregunta si las tareas escolares les provocan estrés.  A los 15 años, cuando ya están terminando la educación obligatoria, un 70% de las chicas dicen sentirse angustiadas por los deberes frente al 60% de los chicos. Estos datos no vienen más que a confirmar el reciente informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en la que sitúa a los estudiantes españoles con 6 horas y media de “deberes” a la semana, un meritorio quinto puesto en el ranking de países con más deberes del mundo, donde la media de horas semanales dedicadas al trabajo fuera del colegio no llega a las 3h.

España figura en las primeras posiciones en el ranking de presión por los deberes escolares.
España figura en las primeras posiciones en el ranking de presión por los deberes escolares. / OMS – ALBERTO HERNÁNDEZ VILLANOVA

Más evidencias sobre la sobrecarga de deberes de los estudiantes españoles las han puesto de manifiesto estudios privados de educación como el propuesto por la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas, que mediante un estudio socio-económico, concluyen que la caída de la inversión en educación desde el año 2011, hace mayor daño en entornos familiares más desfavorecidos, ya que no pueden prestar la atención necesaria a la resolución de los deberes diarios. En palabras del coordinador del estudio, Francisco Pérez: “los jóvenes que crecen en entornos socioeconómicos menos favorables tienen que moverse mucho más solos en la parte de las tareas escolares que se desarrollan en casa y, con más frecuencia, superan peor los obstáculos que en ellas se presentan.” Concluyen el estudio asegurando que los cambios en educación para hacer frente a los retos educativos futuros pasan por igualar las oportunidades educativas de los estudiantes y no solo por asegurarles el acceso a un centro educativo.

¿Cómo se manifiesta el estrés en los estudiantes?

La presión a la que están sometidos los estudiantes, que se traduce en estrés, puede condicionar la aparición de comportamientos que, sin las debidas estrategias de afrontación, pueden acarrear un problema serio de salud. Inicialmente los síntomas clínicos que presentan son muy sutiles, como la apatía, tristeza o tensión, ansiedad, que poco a poco van desembocando en problemas físicos como dolor de cabeza, dolor abdominal, nauseas, dolor de espalda y cuello, mareos, etc.

Son muchas las voces de profesionales de la salud que ya advierten en España de la ineficacia de los deberes sobre la formación de los estudiantes, pediatras, médicos de familia y psicólogos clínicos, identifican un mayor índice de frustración, depresión y malestar en relación con la actividad extraescolar, y no solo del estudiante, si no del núcleo familiar, incapaz en muchas ocasiones de proporcionar una solución viable al conflicto, ya que en ocasiones tienen que decidir entre “contentar al sistema y realizar los deberes”, lo que ocasiona el daño, o “dejarlo suspender” por no hacer sus tareas; una difícil tesitura en palabras del Colegio Oficial de Psicología Clínica.

¿Qué podemos hacer?

La solución es difícil, principalmente porque para lo que a ojos de unos es un problema creciente, para otros es un complemento justo a la formación y necesario para el asentamiento de los conocimientos.

En un lado de la balanza, La OCDE, La OMS, La Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA), asociaciones de estudiantes y parte de las asociaciones de Profesores, están a favor de la regularización del tiempo dedicado a las actividades escolares en horario extraacadémico. No hay una propuesta común en firme que defender, pero muchas son las propuestas que van encaminadas a reducir el tiempo lectivo extraescolar. Importantes acciones sociales, como la registrada en la web CHANGE.ORG, por parte de unos padres madrileños, que ya lleva recogida 205.494 firmas, para la racionalización de los deberes por orden ministerial.

En el otro lado de la balanza, la Federación Española de Asociaciones de Padres de alumnos, plataformas para la reforma de la educación, son partidarios de los deberes como complemento a la educación, ya que a su entender favorecen la asimilación de los contenidos. Luis Miguel Lázaro, catedrático de Teoría e Historia de la Educación en la Universidad de Valencia, propone un máximo de 40 minutos diarios al final de primaria, y cerca de una hora en secundaria, lo que haría un cómputo global de 5 horas semanales. Si bien, también advierte que durante la primaria la relación social del niño es tan importante como las tareas escolares.

La opinión pública en general no se pone de acuerdo. Si nos hacemos eco de la encuesta online realizada por el periódico del Mediterráneo desde la publicación del informe de la OMS, refleja que la opinión publica sigue valorando de forma positiva los deberes con un 67.5%, frente al 32.5% que si los considera perjudiciales.

Más del 32% de los padres opinan que el exceso de deberes es perjudicial para la salud de los niños.
Más del 32% de los padres opinan que el exceso de deberes es perjudicial para la salud de los niños. / DIARIO DEL MEDITERRÁNEO

La polémica está servida. Muchas son las preguntas por resolver antes de tomar una decisión en firme: ¿Qué tipos de deberes son los adecuados para favorecer el aprendizaje? ¿Rutina necesaria o condena? ¿Son los deberes una intromisión al derecho de la vida familiar? ¿Cuáles son las opciones disponibles? ¿Es necesario un cambio en el sistema educativo? ¿Son necesarios cambios que eviten la desigualdad a la hora de realizar los deberes?

¿Qué opináis vosotros?