La malograda actriz Debbie Reynolds, fallecida el miércoles a los ochenta y cuatro años de edad, permaneció unos días hospedada en La Manga Club para formalizar la compra de varios terrenos y un chalé en el recién construido complejo turístico.
Reynolds, madre de la también fallecida actriz Carrie Fisher (la princesa Leia Organa en Star Wars) y protagonista de películas tan conocidas como «Cantando bajo la lluvia» declaró a su llegada a Madrid:
“Vengo a España para comprar una casita en La Manga del Mar Menor, junto al campo de golf del que soy accionista.”
Durante los días que permaneció aquí se dedicó a jugar al golf, a hacerse un reportaje fotográfico de promoción del complejo y a hacer turismo por los alrededores afirmando irse muy complacida por la compra realizada en…
“…uno de los lugares más bonitos que he visto en mi vida.”
La madre de la princesa Leia Organa volvió a La Manga en 1976 a pasar unos días de descanso en su recién adquirida villa en compañía de su nueva pareja, Robert Fallam, tras el divorcio del padre de Carrie, el cantante Eddie Fisher.
Tanto Fallam, muy vinculado a negocios de la construcción, como la propia Reynolds, dueña de un casino en Las Vegas, nunca ocultaron su interés en invertir en complejos inmobiliarios como el que Gregory Peters acabó construyendo en La Manga.
