Un martes 13 de abril de 1965 llegaba al aeropuerto militar de San Javier el primer avión con turistas «habilitada en esta ocasión para el tráfico civil».
«Se trata -añade la prensa de la época- de un ‘Caravelle’ francés con noventa pasajeros en total, de los que veinte son periodistas de diferentes diarios y semanarios parisienses, y los sesenta restantes, turistas que llegan para conocer las instalaciones que se construyen en la Manga, franja de terreno que separa los mares Mediterráneo y Menor. Llegan invitados por las compañías constructoras que realizan en el citado punto numerosas construcciones turísticas.
Poco después de su llegada, unos por mar y otros por carretera, se dirigieron hacia las instalaciones turísticas de la Manga donde varios de ellos piensan adquirir en firme apartamentos y ‘bungalows’ de los que allí se levantan.”
Según la información ofrecida por los promotores… “las compras efectuadas por estos turistas franceses cubren la totalidad de los inmuebles disponibles en La Manga: cien apartamentos, sesenta bungalows y dieciséis locales comerciales, por un importe total de unos ochenta millones de pesetas.”
El día 28 llegaba el segundo vuelo. En esta ocasión un avión de Air France (el ‘Provence’) procedente de París con ochenta y seis pasajeros “…que constituyen la segunda expedición de compradores para las edificaciones que se levantan en La Manga.”
No será hasta el 1 de noviembre de 1968 cuando el aeropuerto cuente con vuelos aéreos diarios con Madrid, Barcelona y Almería a cargo de la compañía nacional Iberia.
Tomás Maestre invitará a un elevado número de personalidades a pasar un fin de semana en La Manga para celebrar la apertura de estos servicios diarios.
En el primer DC-9, el Cuidad de San Sebastián “…descendieron, entre otras personalidades, don José Sirvent, presidente del INI; el conde de Navascués, presidente del Consejo de Administración de ‘Iberia’; el director-gerente de la misma don Lázaro Ros y también el subdirector general de Espectáculos, don Francisco Sanabria Martín.”
Según las negociaciones a las que llegó Tomás Maestre con el Ejército del Aire para el uso conjunto de las instalaciones de San Javier el horario de los vuelos civiles quedaba fijado en “Servicio permanente (h-24) todos los sábados, domingos y festivos, así como entre las fechas comprendidas desde el 16 de julio al 15 de septiembre, desde el 22 de diciembre al 9 de enero y toda la Semana Santa. Los demás días del año el horario de utilización para aviones civiles será exclusivamente desde las 12:00 a 6:00 Z.”
La subsecretaría de Aviación Civil matizaba en el convenio que “La pista tiene un espesor de 47 cm. Y una resistencia LCN de 28 [coeficiente de resistencia de la pista]. Las condiciones de la pista son bastantes restrictivas debido a que fue construida en su día con fines militares. En las solicitudes deberá precisarse tipo de avión y versión del mismo.” Todos estos artículos están basados en información recopilada en el libro “De Cabo de Palos a La Manga del Mar Menor. Del siglo XV al XX” (Edlibrix, 2016 -segunda edición-).
Impresionante el Sr. Maestre. Algunos lo tildan de tiburón especulador sin escrupulos, pero realmente ha sido un autentico emprendedor, empresario visionario y estratega que comenzó un proyecto con criterio y calidad, La Manga, y nadie ha sabido mantener su idea y buen hacer para el desarrollo de esta lengua de tierra.
Estoy completamente de acuerdo con usted mi marido trabajo en el hotel Entremares desde que se inauguró y lo admiraba, decía que tenia mucha vision de futuro.