Año 1969: Zarra, Amancio, Veloso y Santiago Bernabeu visitan La Manga

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Fotografía de la visita de Santiago Bernabeu (en el centro) a La Manga rodeado del alcalde de Cartagena, Ginés Huertas (izq.), y el presidente de la Peña Madridista, Pedro Sabiote (der.). / J.SABIOTE

Los tres mejores futbolistas del momento, Zarra, Amancio y Veloso, estuvieron unos días invitados en La Manga en enero de 1969 coincidiendo con la presencia de éstos en Cartagena para realizar un partido amistoso en homenaje a Norberto Amaro Domínguez.

Amaro, gallego de nacimiento pero afincado durante muchos años en Cartagena, jugó varias temporadas alternadas en el equipo de la ciudad y era tío de Amancio, motivo que justificó la presencia de estos ilustres jugadores en el acto conmemorativo llevado a cabo en la ciudad departamental.

El partido tuvo lugar en El Almarjal, entre el Cartagena y un combinado de jugadores de la selección española, y la presencia de tan ilustres futbolistas no pasó desapercibida entre los promotores de La Manga, quienes no dudaron en ofrecerles una estancia en ella.

El interés que ya despertaba el fútbol en los medios de comunicación no pasaba desapercibido para los promotores de La Manga y, el 7 de julio de ese mismo año, ofrecieron el hotel Galúa para que fuera escenario de una comida de hermandad entre el presidente del Real Madrid, Santiago Bernabeu, y representantes de la Peña Madridista de Cartagena, con su presidente, Pedro Sabiote Collado, al frente.

Al acto asistió también “la primera autoridad civil local”, el alcalde Ginés Huertas Cervantes, y el presidente del Cartagena FC, Hernández, junto con varios miembros de la directiva, el entrenador del Cartagena y diversos privilegiados socios y periodistas locales.

Santiago Bernabeu agradeció la atención prestada:

“Señoras, señores, ilustrísimo caballero alcalde de Cartagena, queridos amigos todos. No puedo dejar pasar este momento para darle las gracias muy hondas y muy entrañables por esa atención tan grande que el señor alcalde ha tenido con hacernos el honor de su presencia, a este matrimonio modesto que nunca creíamos merecer tanto”.