El último Pleno de la Corporación municipal del Ayuntamiento de San Javier acordó esta semana, por unanimidad de todos los grupos políticos, «la recuperación de oficio de una porción de terreno de propiedad municipal» que está siendo usado por el Restaurante Paquebote, en La Manga del Mar Menor, para la instalación de dos terrazas «sobre 447 metros cuadrados de una superficie de 3.360 metros cuadrados de titularidad municipal destinada a sistemas de espacios libres».
El acuerdo adoptado por el Pleno señala que la ejecución de la recuperación del terreno «deberá ir precedida de la demolición de las terrazas instaladas una vez que adquiera firmeza en vía administrativa» la resolución de restablecimiento del orden urbanístico abierto por el Ayuntamiento en mayo de 2017.
El terreno en cuestión, que figura en el Inventario Municipal, procede de una cesión gratuita de 3.360 metros cuadrados que realizó una mercantil a favor del Ayuntamiento en 1994 y donde se acabó instalando dos terrazas de hostelería, una cerrada con una superficie de 250 metros cuadrados y una pérgola de 97 metros cuadrados, que ahora deberán ser demolidas.
La puesta en marcha de esta recuperación de terrenos se formaliza una vez que la Corporación municipal no ha admitido a trámite el último recurso de reposición interpuesto por la empresa afectada.
Al igual que ha sucedido con el Restaurante Área de El Pedruchillo, la denuncia de un particular ha puesto en marcha un procedimiento de recuperación de espacio público sobre una empresa de restauración que ha estado usando estos terrenos de manera irregular durante más de veinte años sin que el Ayuntamiento, gobernado en anteriores legislaturas por mayoría absoluta por el PP, detectara las irregularidades.
Se da la circunstancia que uno de los propietarios del Restaurante Paquebote es el antiguo alcalde popular sanjavierino, José Hernández, socio de la empresa Promociones Sabicasa S.L. cuyo titular es Jaime Navarro e implicados, ambos, en el presunto caso de corrupción urbanística conocido como el «caso Valhalla» que supuso la detención en 2010 del alcalde popular.
Fuentes del Ayuntamiento han reconocido que existe la posibilidad de continuar usando esos terrenos por parte del Restaurante «para los mismos fines» si, una vez concluido el procedimiento de demolición, solicita licencia para la instalación de terrazas en esos terrenos públicos aunque ya se tendrían que regir por la normativa específica que regula este tipo de concesiones y pagar las tasas estipuladas.
Eso, para dos restaurantes que funcionan todo el año en la zona norte y que atraen turismo….
No quieren que La Manga prospere