Martínez-Cachá dedica sólo cinco minutos a la reunión para presentar las nuevas directrices del Mar Menor

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La reunión tuvo la breve presencia de la consejera de Agriculltura y Medio Ambiente al inicio de ésta / CARM

La consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, destinó ayer lunes cinco minutos para recibir a los representantes de los ayuntamientos del Mar Menor y de la Administración regional para, inmediatamente después, disculpar su ausencia argumentando «problemas de agenda» a pesar de ser una importante reunión donde se han dado a conocer las condiciones ambientales del Mar Menor y los criterios de autorización de las intervenciones en la ribera litoral.

Una vez ausente la consejera los técnicos informaron a los representantes de los ayuntamientos, entre los cuales se encontraba la vicealcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón, que la Oficina de Impulso Socioeconómico del Medio Ambiente, junto con profesores del departamento de Hidrología y Ecología de la Universidad de Murcia, han puesto en marcha «un sistema de seguimiento ambiental de las intervenciones que se pretenden realizar en las playas con el objetivo de establecer condiciones para su autorización, monitorizar las actuaciones y evaluar las posibles afecciones a los valores naturales de esta emblemática área protegida».

Para ello, añade la Consejería, se han fijado unos criterios básicos y un catálogo de buenas prácticas ambientales, que deberán tener en cuenta los ayuntamientos en las próximas acciones en las playas destinadas al baño en la ribera del Mar Menor. “El objetivo del catálogo es conseguir la mejora ambiental del litoral y singularmente de los hábitats y especies protegidas”, señaló la consejera.

La Consejería ha tratado de justificar las actuaciones de la Demarcación de Costas antes del inicio de la temporada estival argumentando que los dragados, creación o retirada de espigones, reperfilados, aportes de arena y regeneración de playas son actuaciónes que pretenden «reparar los daños causados por los temporales y las lluvias torrenciales del otoño y el invierno».

«No obstante -señalan- deben evitarse los trabajos que afecten a los hábitats y especies o que agraven el estado ecológico de las aguas de la laguna».

Según la Comunidad estos criterios, además, constituyen «una aportación destacada para la elaboración de un programa de protección y adaptación al cambio climático del Mar Menor, que elaborarán las administraciones costeras, que se impulsará en el marco de las directrices del Plan de gestión Integral del Mar Menor y Franja Litoral Mediterránea, que la Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente está tramitando».

Retirada de espigones, pero con condiciones.

El catálogo «de buenas prácticas» incluye recomendaciones sobre actuaciones para eliminar espigones. Así, cuando sea posible se priorizará la recuperación del hidrodinamismo natural y la textura arenosa de los fondos, eliminando o permeabilizando espigones y otras infraestructuras que limiten la circulación del agua.

Asimismo, «se evitarán todo tipo de dragados, salvo que se trate del interior de los puertos o de los canales de tránsito o golas de conexión al Mar Mediterráneo, siempre con la maquinaria y equipos adecuados para evitar la generación de turbidez en las aguas».

«En cuanto a las aportaciones de arena -añaden-, no debe contemplarse la extracción de este material depositado por arrastre en los primeros metros del lecho marino y se emplearán preferentemente arenas de origen autóctono. Además, deberá llevarse a cabo preferentemente por medios manuales o, en caso de uso de maquinaria, ésa no deberá producir excavación de los fondos e irá trabajando desde tierra. Igualmente, se harán prospecciones previas para detectar la existencia de fartet (aphanius iberus) y plantas fanerógamas marinas».

Respecto a la retirada de fangos, se considera excepcional «porque puede suponer efectos negativos para las comunidades de fanerógamas marinas, razón por la cual se considera inicialmente incompatible con su protección; además, se evitará la extracción con medios mecánicos. Se podría admitir el tapado de fangos con arena».