Las intensas lluvias que azotaron Cabo de Palos el martes por la mañana han vuelto a provocar corrimientos de tierra en la zona «ajardinada» que hay junto al faro de la localidad. Toda la tierra que la lluvia se ha llevado por delante ha acabado en el Mar Mediterráneo, anegando todo a su paso.
Y es que desde que se quitaran las plantas existentes a principios de año para acondicionar la zona con tierra vegetal, la zona está completamente a la merced de los elementos. Los trabajos de jardinería previstos quedaron interrumpidos por las elecciones municipales del mes de mayo, sin que ni el Ayuntamiento de Cartagena ni el Instituto de Servicios del Litoral (IMSEL) hayan hecho nada por solucionar el problema.
A principios de septiembre ya se produjeron hechos similares, quedando el paseo bajo una gruesa capa de barro que posteriormente se endureció.
