El coordinador de la programación de La Mar de Músicas, Toni Peña, ha confirmado a Diario de La Manga que este evento «no tiene previsto este año ninguna actuación en La Manga», contradiciendo así las declaraciones que realizó la concejal de Turismo, Obdulia Gómez, en noviembre del año pasado durante una reunión que mantuvo con la Consejería de Fomento en la que se dio a conocer la nueva estrategia que el Gobierno regional quería para La Manga.
“La Mar de músicas sacará el año que viene algunas actuaciones fuera de Cartagena, en La Manga”, estas fueron las declaraciones de la concejal que ahora se niega desde la dirección de La Mar de Músicas.
Según Toni Peña este año tan solo se va a realizar (fue el pasado martes) una actividad en la barriada José María Lapuerta dentro del espacio «La Mar de Barrios».
«Se organizaron conciertos, pasacalles y animación en colaboración con la asociación de vecinos y diversos colectivos de la bariada», ha afirmado a DLM.
Peña únicamente tiene constancia de haberse estudiado la posibilidad de realizar un concierto este año en La Azohía que, al final, no salió. «Pero en ningún momento hemos estudiado ni contemplado hacerlo en La Manga este año ni nadie nos habló de ello».
Para 2017 si hay previsto ampliar el espacio «La Mar de Barrios» haciendo un par de actuaciones fuera de la ciudad, en barrios y «posiblemente, en la costa».
Vergonzoso a la vez que una oportunidad más perdida de apoyar la cultura en un espacio de alta incidencia turística como es La Manga del Mar Menor. El centralismo que padecemos en La Manga ejercido por los dos consistorios, Cartagena y San Javier, es realmente bochornoso y agotador. Sólo con organizar una actuación en La Manga o Cabo de Palos de todos y cada uno de los muchos festivales que existen, por sí mismo nos garantizaría más de 30 actuaciones al año. Y sin modificarse apenas los presupuestos.