En el último Pleno celebrado en el Ayuntamiento de San Javier el equipo de Gobierno popular, y a través de una moción de urgencia, ha decidido subirse el sueldo un 30% fijándose el propio alcalde, José Miiguel Luengo, un salario bruto anual de 52.000 euros.
Se da la circunstancia que la moción, que ha aprobado la subida salarial, lo fue gracias al voto de calidad del propio alcalde, ante la abstención del concejal no adscrito y el voto en contra de los grupos socialista, Ganar San Javier y Ciudadanos «por no haberla consensuado».
El incremento retributivo también beneficia en igual porcentaje a los dos concejales con dedicación exclusiva, el edil de Urbanismo, Agricultura y Medio Ambiente, Antonio Luengo, y el edil de Turismo, Playas, Comercio y Empleo, Antonio Martínez Torrecillas quienes pasan a cobrar 42.000 euros brutos anuales cada uno.
Los cinco concejales con dedicación parcial cobrarán 28.000 euros mientras que el resto del equipo de Gobierno y la oposición «cobrarán por asistencias a Juntas de Gobierno y cuya indemnización pasa de 200 a 400€ y a Plenos que pasa de 500 a 700€».
De esta forma los mencionados ediles recuperan la pérdida del poder adquisitivo que sufrieron en 2015, tras un acuerdo de la oposición que les rebajó ese porcentaje para tratar de contener el gasto municipal.
Plan de racionalización de los recursos humanos del Ayuntamiento
En el mismo Pleno, donde se aprobaron los presupuestos para 2017, se acordó un «plan de racionalización de los recursos humanos» de los funcionarios dependientes del Ayuntamiento.
«La asunción de los trabajadores del Patronato Deportivo Municipal de San Javier por el Ayuntamiento a partir del 1 de enero -añade la Corporación- tras la disolución de la entidad municipal que gestionaba la política deportiva en el municipio motivó la elaboración de un Plan General de Ordenación de Empleo Público del Ayuntamiento de San Javier», que fue aprobada en Pleno con los votos del equipo de Gobierno y el voto de calidad del Alcalde, tras el empate por la abstención del concejal no adscrito y el voto en contra del resto de grupos de la oposición que mostraron su rechazo a la reorganización de los puestos de trabajo que se incluyó en el texto.
El propio Antonio Luengo defendió que este plan, aprobado al mismo tiempo que su propia subida de sueldo, no es más que una racionalización de los recursos humanos “para ajustarlo a las necesidades actuales y que no supone subidas ni coste alguno para el Ayuntamiento”.
El portavoz del equipo de Gobierno y concejal de Hacienda, Carlos Albaladejo, defendió el presupuesto que calificó de “ambicioso, social y propio de un pueblo en marcha”.
